- Imegen, Quibim, Agrozono, Bioinicia, Bionos Biotech, Kanteron Systems y Biótica aportan sus conocimientos y tecnología
BIOVAL, clúster de empresas y entidades del sector BIO de la Comunitat Valenciana, se pone al servicio de las Consellerias de Economía, Innovación y Sanidad para hacer frente a la pandemia provocada por el COVID 19.
En ese sentido, el presidente de BIOVAL, Carlos Ledó, ha puesto de manifiesto la importancia de la ciencia en estos momentos y la relevancia de las iniciativas que se están llevando a cabo por parte de las empresas valencianas integrantes del clúster para luchar contra el coronavirus desde los ámbitos de la Biotecnología, la Biomedicina y la Bioeconomía.
De hecho, las asociadas Imegen, Quibim, Agrozono, Bioinicia, Bionos Biotech, Kanteron Systems y Biótica llevan ya semanas ofreciendo su experiencia y recursos a las autoridades locales, nacionales y europeas.
La empresa Imegen, instituto valenciano especializado en genética y genómica, está preparando su laboratorio de microbiología clínica test diagnósticos con la intención de poder realizar hasta 500 pruebas diarias del coronavirus con resultados en 5 horas, para ponerlas al servicio del Ministerio de Sanidad.
Por su parte, Quibim, gracias a su experiencia en el uso de su tecnología para detectar patologías, se suma a la batalla utilizando la inteligencia artificial para, a través de imágenes médicas, lograr un primer ‘screening’ del coronavirus para realizar diagnósticos rápidos del Covid-19 y priorizar así la hospitalización del paciente. Además, colabora con empresas europeas en una iniciativa europea multicéntrica cuyo objetivo es mejorar el diagnóstico de COVID-19 por tomografía computarizada (TC).
Otra empresa asociada a Bioval que se une en esta lucha es Agrozono, líder en la aplicación de ozono a través del riego localizado para la regeneración de suelos agrícolas, que ha ofrecido a las administraciones públicas cinco grandes equipos móviles de generación de ozono para realizar con ellos tareas de desinfección.
Por su parte, ante la escasez de material de protección, Bioinicia está desarrollando y manufacturando rollos textiles con nanofibras para fabricar filtros y mascarillas de uso médico, que impiden el paso e inactivan el COVID-19. Su capacidad actual de fabricación de nanofibras es de 10 toneladas al año, de forma que podría fabricar alrededor de 3 millones de metros cuadrados para hacer filtros y mascarillas junto con sus partners en España, Reino Unido, Suiza, Hong Kong, China y Taiwan.
En el mismo bando se sitúa Bionos Biotech trabajando, a falta de las muestras reales, en el protocolo de extracción y test de PCR para el covid19, sin incluir kit para que sea más económico. Esta empresa está ubicada en el Hospital La Fe de Valencia, lo que permite que todo el proceso de extracción de muestras y análisis se haga sin necesidad de transporte, de forma que el proceso se agiliza y se pueden llegar a realizar 1.000 test al día.
Por otro lado, la Plataforma de Kanteron Systems, destinada a la integración de datos sanitarios, ha sido revisada por expertos de la Organización Mundial de la Salud para su aplicabilidad a COVID-19. Esta empresa además de haber donado una impresora 3D, se ha ofrecido a colaborar en el ámbito científico con investigación computacional y ha puesto su tecnología a disposición de la UE.
Por último, Biótica está actuando en dos frentes. Uno de ellos es el desarrollo de un método de concentración y/o detección virológica (coronavirus, antígenos y/o anticuerpos) en muestras clínicas mediante estrategias bioquímicas y moleculares que incrementen su sensibilidad. El otro se dirige a facilitar la formación y suministro de pruebas rápidas validadas y certificadas para la detección de Legionella.
Durante estos días, la presidencia de BIOVAL está en contacto directo con las empresas asociadas para recabar todas novedades acerca de sus proyectos y poder así mantener informadas a las administraciones y a la sociedad con el fin de colaborar de forma activa y desde primera línea en la lucha contra el coronavirus.